Festina lente, apresúrate despacio

El viernes 13 de junio estaré firmando ejemplares de “Emprender con calma” en la Feria del Libro de Madrid. En la caseta de Arpa (nº198, frente al pabellón de la Comunidad de Madrid) de 19:00h. a 20:00h. Después tendremos un encuentro presencial con lectores al que se suma mi editor David Remartínez. Hablaremos sobre qué es eso de “emprender un libro”. ¿Te apuntas? Toda la info aquí

Andaba revisando mis notas de La resquebrajadura, un ensayo tremendamente poético del mexicano- hijo de exiliados republicanos españoles- Jordi Soler que leí hace un par de años. Buscaba la reflexión que hace sobre la locución latina festina lente: apresúrate despacio. Se atribuye al emperador Augusto, aunque fue popularizada por Erasmo de Rotterdam.

«Que la prisa, aunque esté ahí mismo acechándote, no te aturda, ni te obnubile, a la hora de estar concentrado en el presente, gozando de tu fruto que es vivir el sentimiento oceánico», propone Soler.

Hace un par de meses empecé a releer el Tao Te Ching en compañía de DeepSeek y hoy le pedí que me explicara si existen conceptos similares a festina lente en el taoísmo. Me cuenta que ambas tradiciones enfatizan la acción eficaz mediante la calma, pero con matices distintos. El concepto taoísta que más podría acercarse no es una paradoja, sino una armonización natural con el Tao. Se trata de Wu Wei (無為), uno de los pilares de la filosofía de Lao Tse. Su traducción literal es «no acción», pero su significado real es mucho más profundo: no es pasividad ni pereza, sino actividad alineada con el flujo natural. Es actuar sin forzar, como el crecimiento de una planta. Es eficacia sin esfuerzo necesario, lograr más haciendo menos, al eliminar la resistencia contra el curso natural de las cosas. En esencia, Wu Wei es el arte de cooperar con la inteligencia del universo, con la inteligencia colectiva, en lugar de luchar contra ella.

¿Cómo aplicamos esto de manera concreta en el emprendimiento?

  • Ejercitando la mirada antropológica más allá de la tiranía de lo cuantificable.
  • Confiando en los procesos naturales y en nuestra intuición, que no es otra cosa que acumulación de información orgánica y que proviene de procesos de escucha significativos.
  • Delegando tareas, evitando la microgestión y liderando con humildad.
  • No reaccionando con pánico ante las crisis, sino observando y persiguiendo la rapidez en la ejecución de soluciones, pero la lentitud en la reflexión para encontrarlas.

Todo ello exige atención plena para saber discernir el flujo natural de las cosas, valor para soltar el control cuando es necesario y sabiduría para actuar en el momento preciso.

El «festinalentazo» de Google

Recurrir a «La Resquebrajadura» es consecuencia de mi afán por procesar sosegadamente lo que nos contó Google en su Google I/O 2025 y que en un par de días ha redefinido la conversación en el campo de la inteligencia artificial, especialmente en lo que respecta a los agentes de IA. Todo el silencio de estos últimos meses que ha llevado a muchos «expertos» a afirmar que los de Mountain View se estaban quedando rezagadísimos en la carrera de la IA se ha dado completamente la vuelta.

Google no estaba muerto, ni de parranda, estaba apresurándose despacio a soluciones (y agentes) que en estos momentos absolutamente nadie tiene la capacidad de desarrollar. Básicamente porque el mayor pedazo de nuestras vidas en internet llevamos año regalándoselo a elllos. Y porque son la diosa del «buscar».

Pídele a Gemini que te describa los anuncios clave que hicieron y que te desarrolle sus implicaciones.Y a partir de ahí, limítate a fluir.

¿Te ha interesado lo que has leído? Puedes profundizar aún más en ello en mi libro Emprender con calma.

También en La Slow Newsletter, un (breve y mínimo) email que envío una vez al mes con reflexiones, recursos y curiosidades para tomarse el emprendimiento (y la vida) sin prisa, pero con alma.

La representación gráfica de festina lente que se ha utilizado desde la Antigüedad es la asociación de un ancla y un delfín, también un caracol alado como este que me ha hecho Gemini.